Si la mayoría coincide en que Arturo Frondizi fue uno de los estadistas más grandes de la historia Argentina, ¿por qué no dimos continuidad a su modelo de país? En torno a esta pregunta cerró Horacio Rodríguez Larreta el evento del Día del amigo desarrollista. El jefe de Gobierno porteño buscó proyectar una visión nacional. Tanto, que algunos medios interpretaron el acto como un lanzamiento de su candidatura presidencial. No hubo nada de eso. No se habló de candidaturas ni de coyuntura. Sí se habló de la necesidad de construir consensos en temas estratégicos, de mirar a largo plazo y, sobre todo, de poner fin a la confrontación política exacerbada. “Terminar con la grieta es la única manera de generar un camino de desarrollo”, sostuvo Rodríguez Larreta, que disertó junto a Rogelio Frigerio, María Eugenia Vidal, Martín Lousteau, Margarita Stolbizer, Facundo Manes y Ricardo López Murphy. Una mesa amplia y diversa —desarrollistas, liberales, socialdemócratas y representantes de la sociedad civil— que se reunió para homenajear al fundador del desarrollismo.
Rogelio Frigerio ofició de anfitrión en la sede histórica del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID). El exministro del Interior destacó que “en un momento de tanto enfrentamiento, personas de distinta extracción política puedan sentarse juntos, por lo menos para ver en qué están de acuerdo”. “Esto hay que transformarlo en consensos básicos para dejar atrás tantas décadas de frustración y deterioro del entramado social y productivo”, propuso y advirtió de que confrontar es el camino más fácil. “Mi abuelo estaría muy contento de verlos a ustedes acá sentados en torno a este objetivo”, completó.
El encuentro tuvo la dinámica de un juego: cada uno de los expositores tenía que leer una frase del discurso de Arturo Frondizi del 1 de mayo de 1958 y reflexionar sobre su vigencia. “Coincidimos en la actualidad que tienen estas frases —señaló Margarita Stolbizer—. Es así porque Argentina arrastra problemas estructurales, pero señalar solo eso sería mezquino, porque no reconoceríamos la visión de Frondizi y Frigerio. Lo valioso de los discursos de los grandes estadistas es que no usan la chicana”.
Hay un motivo por el que los estadistas no chicanean, según Martín Lousteau: “No le quieren ganar al otro, le quiere ganar al presente”. El economista destacó que el desarrollismo era una concepción de país, basada en un diagnóstico lo suficientemente sofisticado para enfrentar la realidad de aquel momento. Lousteau advirtió de que un proyecto de desarrollo en los sesenta era sinónimo de industrialización, porque la industria era el único sector donde aumentaba la productividad. “Hoy debería ser más sencillo mirar en el interior del país y ver que el aumento de productividad ocurre en el campo y en los servicios”, matizó. “Gran parte de las frases de Frondizi muestran que los problemas son los mismos, pero agravados. No hay un solo problema que haya salido de superar los anteriores”, cuestionó.
En la misma línea que los expositores, el presidente del MID, Juan Pablo Carrique, celebró la posibilidad de encontrar puntos de acuerdo. “El país está en un momento muy crítico. Hacen falta gestos como los que vimos hoy acá. Dirigentes que entienden que los problemas el país son muy graves como para mantener el nivel de confrontación actual. Se necesita decisión para construir consensos y enfrentar los problemas estructurales del país”, declaró Carrique tras la reunión.
Tolerancia y apertura
El debate es genuino cuando se plantea entre quienes piensan distinto. Esto lo dejó en claro López Murphy, que enfatizó la “tolerancia y apertura de los desarrollistas”, que lo invitaron “sabiendo que van a escuchar una opinión muy opuesta”. “La capacidad de dialogar con firmeza y claridad, con puntos que no podemos ponernos de acuerdo, forma parte de la convivencia civilizada”, completo el economista. El referente liberal destacó, sin embargo, los puntos en los que sí hay coincidencias: el imperio de la ley y la construcción de un proyecto que integre a toda la sociedad con una visión de prosperidad.
El respeto de las instituciones fue un tema recurrente a lo largo de la jornada. María Eugenia Vidal señaló que “el desarrollo y la integración están íntimamente vinculados a la legalidad”. La exgobernadora, que participó en forma virtual, no solo citó la frase de Frondizi que le había tocado, sino que mencionó Las condiciones de la victoria, el libro más conocido de Rogelio Frigerio. “El concepto de la alianza de clases y sectores esta más vigente que nunca”, concluyó.
En Argentina falta un proyecto inspirador, como fue la democracia en el 83, según Facundo Manes. Todos nos tenemos que sentir parte del proyecto de desarrollo. Hoy el proyecto de la democracia es el desarrollo y la vía es el paradigma del conocimiento”, señaló el neurólogo, cada vez más involucrado en el debate político. “Los países compiten hoy por los sistemas educativos científicos y tecnológicos, ahí está la soberanía”, completó.
El evento tenía fines conmemorativos, aclaró el MID. Era un homenaje al fundador del desarrollismo. Pero con la puesta en escena y los discursos, el partido logró posicionarse en el lugar que históricamente ha tenido: un ámbito de encuentro donde se generan consensos para el desarrollo.
¿Valorás nuestro contenido?
Somos un medio de comunicación independiente y tu apoyo económico es fundamental para que que este proyecto sea sostenible y siga creciendo. Hacete socio y construyamos juntos Visión Desarrollista.
,Hacete socio
xx
